Cuando Geòrgia Costa era pequeña, en el cole le
echaban la bronca por leer a escondidas en lugar de atender. Con el
tiempo, sus profesores se dieron cuenta de que no había nada que
hacer: ya le había picado el gusanillo de la literatura.
Acabó estudiando Historia y Arqueología y hoy en día se la puede
ver mientras pasea a turistas por las ruinas romanas de Tarragona,
o bien andando por la calle mientras lee algún que otro libro (es
una experta, no se choca contra casi nada).
En sus ratos libres bebe té en tazas gigantescas y escribe novelas,
a veces sola y a veces a cuatro manos con Fernando Alcalá.
Ask a Question About this Product More... |